Hoy conocemos a Fernando, ávido observador de aves y fundador de GOUCA.
¡Encantado de conocerte, Fernando! Como fundador de este grupo, ¿puedes decirnos qué es exactamente GOUCA?
El Grupo Ornitológico de la Universidad de Cádiz es un grupo aficionado de personas apasionadas por las aves, cuyo fin es el enseñar la riqueza ornitológica de la provincia de Cádiz principalmente al gremio universitario y de manera secundaria al resto de personas, a través de salidas de campos, charlas y demás actividades.

Fue un proyecto que surgió poco a poco. Comencé a aficionarme hace dos años cuando entré en la universidad, descubrí las aves del entorno de la Algaida y empecé a estudiarlas, más tarde entré en un curso para formarme como anillador experto de aves y fue entonces cuando observé que en la universidad apenas había iniciativas prácticas respecto a las carreras de Ciencias del Mar y Ambientales y deicidí comenzar a enseñar a un grupo de amigos las aves del entorno, paulatinamente fui conociendo a personas de la universidad que también le apasionaban las aves (estudiantes y profesores) y un día encargué a mi pareja el logo del grupo, creé un grupo de Whatsapp, lo comenté con gente conocida que le podía interesar que fueron sumándose al proyecto y fui “contratando” a personal para la gestión.
Sabemos que la Universidad de Cádiz (UCA) desde la Facultad de Ciencias del Mar y Ambientales está interesada en nuestro proyecto, hasta ahora nos han facilitado la realización de las diferentes actividades que hemos realizado y esperan poder ayudarnos en todo lo que puedan.
¿Qué te inspiró a iniciar un grupo ornitológico?
Podría decirse que la misma pasión que siento por las aves. Desde siempre me ha gustado
enseñar, la chispa quizás comenzó con las primeras salidas esporádicas que hacía con algunos amigos de la facultad por la Algaida, el ver la emoción de descubrir nuevas especies extraordinarias me animaba a seguir compartiendo este maravilloso mundo con más personas.

¿Cómo empezó tu pasión por las aves?
Mi pasión por las aves comenzó una vez entré en la universidad, entre horarios iba a darme algún paseo por la Algaida y empezaba a fijarme en todo, los primeros momentos de interés comenzaron al observar las limícolas del Brazo mareal del Río San Pedro, jamás vi esas aves con contrastes tan diferentes entre sí y comencé a visitar la biblioteca de la facultad en busca de bibliografía para saber que especies estaba observando.
Realmente fue un aprendizaje solitario, curioso y autodidacta, el comenzar a identificar
correctamente las especies se convirtió en un reto para mí. Después de un tiempo la figura
del anillador Alberto Álvarez en los anillamientos que ejercía junto a su equipo en la Algaida
me inspiraron a profundizar más en su estudio, luego conocí a mi gran amigo Miguel Ángel
Mora, gran apasionado que llevaba más tiempo que yo en el mundillo que me transmitió su
sabiduría pacientemente.
¿Por qué te parece tan interesante la ornitología?
La ornitología me es fascinante en todos sus aspectos, desde la propia belleza del ave hasta todo el contexto que lo engloba, el saber de sus etiologías y ecosistemas engloba no solamente a ellas sino a aprender más sobre toda la naturaleza que las rodea.
Las aves son muy bellas por naturaleza, son abundantes y fáciles de observar es por ello que vayas a donde vayas siempre vas a poder verlas, es un hobby que siempre te acompaña.
¿Cómo crees que puedes motivar a otros jóvenes para interesarse por la ornitología y
a salir al campo?
Lo primero que digo a la gente que quiere empezar a aprender es que sean curiosos, que tengan dudas, que consulten información... Salir al campo es algo que puede ser desagradable para algunas personas pero una vez que les muestras aquellas especies que antes eran invisibles para sus ojos empiezan a gustarle más.
¿Por qué te resulta tan emocionante observar una rareza?
Desde un punto de vista científico el ver algo raro es fascinante debido a la improbabilidad del avistamiento, aquellos patrones de migración poco habituales, son dignos de estudio, pueden llevar a información muy valiosa sobre diferentes aspectos tanto de esa especies como del lugar y las condiciones del por qué de la observación.
Fernando, ¿puedes hablar de tu ave favorita?
Realmente esta es una pregunta complicada, hay innumerables especies que me fascinan pero si tuviera que quedarme con una sería la curruca cabecinegra, fue una de mis primeras aves anilladas, de los primeros Passeriformes que descubrí y el ave más común de la Algaida, es por eso que le tengo un cariño especial.

¿Cuáles son tus sitios favoritos para pajarear?
Tenemos en la provincia numerosos puntos de observación donde se agrupan grande cantidades de aves pero al ser de San Fernando tengo dos lugares los cuales les tengo especial cariño y son el Caño El Carrascón y Río Arillo, son muy accesibles poseen muchas especies y siempre te llevas alguna sorpresa. Luego hay lugares top como La Janda, Salinas Marisma de Cetina y Costa Ballena que son lugares que obligatoriamente hay que ir de vez en cuando.

¿Cuánto tiempo sueles dedicar a las aves en una semana?
Como cualquier otra afición suele ser una constante en tu vida diaria, podría decir que
siempre todos los días le dedico a ello un rato, sea estudiando, saliendo al campo,
observando fotos, leyendo etcetera.
¿Ves que el interés en la observación de aves va creciendo?
Desde mi foco universitario se podría decir que sí, hay gente que tiene mucho interés en aprender pero no sabe realmente cómo empezar en este mundillo y ese es el problema, desde un aspecto más generalizado es preocupante la media de edad de aquellas personas que somos aficionados a esto, cada vez menos jóvenes sienten atracción sobre este tema y es algo que dentro de unos años puede que pase factura.
¿Quién se puede unir a GOUCA?
Cualquier persona puede unirse al GOUCA si lo desea, seas o no de Cádiz o seas o no
estudiante de la UCA, al fin y al cabo es un grupo para compartir vivencias. Tenemos un
enlace donde viene un formulario de inscripción, nuestras redes sociales y merchandising.

¿Qué planes tienes en el futuro con GOUCA?
En el futuro deseamos como grupo que una vez los coordinadores nos hayamos
matriculado de nuestras respectivas carreras se quede, continúe y siga transmitiendo el
mensaje que damos, enseñar sobre la riqueza ornitológica de nuestra región. Tenemos
pensado darnos de alta como asociación y compartir nuestro mensaje a más personas de
manera altruista y al ser posible participar en investigación sobre proyectos con aves.
¡Muchas gracias por tu tiempo! ¡Nos vemos pronto en el campo!
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